José Manuel Cortina es un entrenador virtuoso a la hora de recuperar brazos. Sus amplios conocimientos lo hacen un sabio de su deporte.
Su hoja de servicios y brazos recuperados parten desde el mismísimo Rogelio García (el ciclón de Ovas) hasta llegar a José Ramón Rodríguez, para ejemplificar con una línea de tiempo.
Su último trabajo fue con el zurdo Liván Moinelo, el cual se sometió a una operación en el brazo de lanzar y ya se encuentra recuperado.
Su debut en la Liga Élite, con Artemisa, no pudo ser mejor, y el profesor Cortina aprovechó la buena actuación de su discípulo y explicó en su perfil de Facebook todo lo que hizo en la recuperación de Moinelo.
Comentario publicado en el perfil de Facebook de Cortina:
Lamentablemente, no pude ver a Moinelo hoy lanzar, pero las opiniones son favorables y quiero quitar la preocupación que Reinier tuvo hoy en la transmisión del juego por el amor que siente por todos los atletas y aliviar a todos los admiradores que tiene Moinelo de esa pesadumbre.
En mi trabajo con él, medí fuerza, resistencia y explosividad a los envíos, así como tiempo de recuperación entre un Bullpens y otro.
En las 16 semanas de trabajo hacia la cuarta semana, Moinelo tiraba todos los días y nunca tiró menos de 60 envíos. Si puse 25 fue porque yo no estaría con él, pero si hubiera estado, hubiese tirado muchos más.
Porque él, esa prueba de pitcheo encima del montículo, los rompimientos los hacía desde la distancia real, pero los lanzamientos rápidos (rectas) los hacía a una distancia entre 68 y 70 pies; por tanto, la seguridad que yo tenía sobre cómo se comportaría era real.
En mi observación de la velocidad, y en eso Reinier, el psicólogo, no me dejará mentir, calculaba de 90 a 92 millas; por tanto, fueron varias veces ese trabajo de recuperación y eso me daba la estabilidad que tenía, y prueba de ello fue que me dijeron que manifestó un buen control.
Así que a sus admiradores, tranquilos, que Moinelo estará para rato. Yo he trabajado con muchos brazos rotos y con magníficos lanzadores con una gran profesionalidad; Moinelo es uno de ellos.
Seguro que hoy dormiré tranquilo porque, como le he dicho a muchos amigos, Moinelo me quitaba el sueño, no podía fallar con él por su don de gente.
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