Erly Casanova,valiente lanzador pinareño, protagonizó una hazaña extraordinaria en la final de la Liga Élite al enfrentarse al formidable equipo de Matanzas.
A pesar de haber estado alejado de los terrenos durante un par de semanas debido al doloroso fallecimiento de su esposa, Erly demostró una maestría, coraje y determinación excepcionales al lanzar los nueve innings en el estadio 26 de Julio.
Su valor y entrega se manifestaron claramente, llevando a su equipo de Artemisa hacia una victoria merecida.
La historia de Erly Casanova en ese encuentro trasciende más allá del béisbol, convirtiéndose en un ejemplo inspirador de superación y dedicación en momentos difíciles.
En medio de este triunfo emotivo, su profesor y amigo José Manuel Cortina no escatimó en elogios y le dedicó palabras conmovedoras.
Publicación de José Manuel Cortina:
«No sé si a alguien más le corrieron dos lágrimas por sus ojos.
«No sé si me estoy poniendo viejo. No sé si es la estimación que tengo de Erly, pero hoy lloré en silencio en mi sala, disfrutando de una soberbia demostración de pitcheo.
«Con mis ojos húmedos y con propiedad digo soberbia, porque yo miro lanzamiento por lanzamiento y les puedo asegurar que Erly fue genial.
«Cuando Rodolfo mencionó la posibilidad de un cambio rápido, le respondí que, no era Erly y nadie más.
«La explicación a mi opinión le dije que era difícil explicarla por teléfono; otro día lo haré.
«A Erly, toda mi admiración. Hoy demostró que es uno de los tres mejores lanzadores que tenemos, para no ser absoluto.
«Si este post me da la posibilidad de explicarlo, lo hago; si se me corta, lo dejo para otro momento: el porqué de Erly para el noveno.
«Cuando hay maestría y profesionalidad, cuando hay seriedad en lo que se hace, cuando hay espíritu de superación, cuando hay dedicación, cuando se es trabajador disciplinado, las cosas lindas siempre llegan.
«Hoy, ese hijo de ese gigante dio muestra encima del montículo de una autovaloración y una inteligencia extrema.
«Gracias, mi sobrino, por hacerme llorar; gracias por dejarme estar a tu lado.
«Gracias por hacerme hoy muy feliz. Gracias por tu maestría. Gracias por todo. Un abrazo por moverle el corazón a todos tus pinareños.»
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