René Navarro, destacado narrador-comentarista deportivo, volvió a cargar contra la mala organización y gestión disciplinaria de la Serie Nacional de Béisbol.
A raíz de los últimos acontecimientos de la 61 SNB se han suscitado muchos comentarios negativos sobre el mal actuar de la Comisión Nacional.
Altercados, faltas de respeto de (y con) los árbitros, bronca entre los atletas y otras cosas han pasado desapercibidas y con medidas blandas por parte del nuevo comisionado y su grupo de trabajo.
Texto íntegro del profesor René Navarro:
EN CUBA
Hace algo más de 8 años escribí sobre este tema en las redes sociales y hubo reproducción en varios medios nacionales y provinciales.
Esta vez, aunque reconozco un diferente panorama, alerto sobre el DAÑO que provocan a nuestro movimiento deportivo estas irregularidades.
Las sanciones o multas, amigos míos, deben ser duras y VERDADERAMENTE EJEMPLARIZANTES.
Permítanme repetir hoy varios párrafos de lo publicado el 19 de febrero de 2014.
Resulta cotidiano ya, forma parte del empañado espectáculo que se llama Serie Nacional de Béisbol. Extrañamos la pureza y el saludable ambiente que reinaba antes en la mayoría de los juegos de nuestra pelota, libre de malcriadeces y mediocridades de aquellos que fueron fundadores o continuadores de las más admiradas figuras.
Los cambios en el comportamiento de muchos de los jugadores que vemos hoy en nuestros estadios, se parecen bastante al de los inescrupulosos y rechazados personajillos que andan por nuestras calles. Parece que ese mal invadió también nuestros eventos deportivos.
No fuimos capaces de frenar en su momento –hace ya algunos años – las primeras manifestaciones indeseables de atletas, entrenadores y hasta del propio público. La prensa no jugó su papel. Poco a poco estas repugnantes conductas se multiplicaron y los hechos más recientes nos demuestran que es en la actualidad una rutina.
El último de estos episodios ocurrió hace algunas horas en el encuentro Villa Clara–Matanzas. No son únicamente las habituales discusiones por determinada decisión arbitral, una botella lanzada desde las gradas, o los envases del maní arrojados al terreno. NO, ya llegamos hasta la amenaza o agresión física entre los protagonistas.
Un sistema y movimiento deportivo que estaba libre de tales anormalidades se presenta ahora con una imagen denigrante.
BUENAS Y MÁS SATISFACTORIAS FORMAS DE DECIR
Verdadera lástima que en la sobresaliente Mesa Redonda que presenciamos hace algunos días no se le haya dedicado un duro párrafo a este tópico.
Por cierto, que nuestra prensa deportiva debe ser más atinada y crítica en sus consideraciones, apreciaciones y todo lo que BENEFICIE a un superior andar de lo que hacemos en Cuba.
Una buena parte de los que hablan, comentan o escriben no alcanzan a satisfacer lo que desean escuchar o leer las personas con determinados conocimientos y cultura en este país.
Si abogamos por una revisión de la pelota dentro de la isla y de otras actividades del deporte, debemos modificar también ese lenguaje triunfalista que no conduce a sanar nuestras deficiencias.
Para convencer a la gente que PIENSA, primero debemos estar convencidos nosotros, los que pluma en mano o micrófono por delante, tenemos la responsabilidad de contribuir a la mayor educación y cultura de los buenos cubanos.
*Tomado del perfil de Facebook de René Navarro