POR: PEPE MOREJÓN
Aunque en los últimos años hemos visto figuras jóvenes engrosar las filas del equipo grande de Pinar del Río, aún se puede hacer más para garantizar un saludable futuro en las distintas posiciones del campo.
Todas las áreas son susceptibles de dar oportunidad a nuevos aspirantes para la venidera Serie Nacional de Béisbol 61.
Ciertamente, no es la edad de un pelotero lo que determina su inclinación al retiro o renovación, sí lo es su bajo rendimiento, demostrado año tras año.
Pinar del Río tiene varios veteranos que, sin ser descartes, pudieran dar paso a jóvenes promesas con talento demostrado quienes no pueden desplazar a figuras establecidas.
Es un hecho probado que las aspiraciones championables de los timoneles vueltabajeros ha conducido a usar más a consagrados que a figuras noveles en función de esperanzadores triunfos y mejor ubicación en la tabla de posiciones, en detrimento del desarrollo de prospectos.
CATCHERS
La receptoría vueltabajera tiene dos talentos que felizmente ya recibieron oportunidades suficientes en la SNB 60.
Yoan Rojas ocupó la titularidad hacia el final del campeonato y Yanciel Ajete alternó en varias ocasiones.
Ya sabemos que la mayor demanda para un enmascarado es su defensa y guía a los serpentineros.
Sin embargo, en una novena como la de Vegueros, donde la ofensiva ha sido el punto flaco en recientes años y que solo al final de la contienda pudieron elevarlo a 284, requiere que cada hombre en el line up sume su granito de arena. Los mencionados bisoños lo hicieron por encima de 300.
Rojas (310 ave) fue el más valioso de los cuatro enmascarados en este renglón en la última versión de la SN con bateo superior de largo alcance, 36 incogibles, 10 dobles, un triple y tres bambinazos, 22 CA y 16 CI.
La formación de un receptor lleva años, es el último en madurar y él solo tiene 23, a la defensa “Chicho” tuvo efectividad de 983.
Yanciel Ajete también con 23 años es un atleta pimentoso. Aunque sus oportunidades de juego fueron menores a lo largo de la pasada contienda, bateó para 323 (31-10), dos dobles y un jonrón, siete carreras anotadas e igual cifra impulsadas. En 80 lances no cometió errores (1000).
Irandi Hernández (34 años) es un hombre de buen desarrollo ofensivo. Ya fue probado en los jardines, pero los especialistas lo ubicaron en la receptoría como posición más ajustada para él.
Su inamovilidad dentro de las filas vueltabajeras año tras año, se justifica por ser oportuno en rol de emergente.
A la defensa, la pasada serie lo hizo en un solo juego durante seis capítulos y sus cifras fueron inmaculadas.
Para este redactor, ellos tres tienen altas probabilidades de vestir de nuevo el uniforme verde-amarillo.
Urquiola debe ofertar una plaza a un joven valor que pudiera estar entre Randy Muñoz, Daniel Martínez, Alejandro Morales, Yohan Fernández o Yoel Frontela.
POR: PEPE MOREJÓN